Preparación:
Precalienta el horno a 200ºC.
Lavamos los calabacines, los cortamos por la mitad a lo largo y los vaciamos con una cuchara, reservando la pulpa.
A continuación pelamos la cebolla, la cortamos en cuadraditos pequeños y rehogamos en una sartén con una cucharada de aceite. Cuando empiece a coger color, añadimos la pulpa de los calabacines y dejamos cocer a fuego lento durante 5 minutos.
Retiramos del fuego y escurrimos el agua que hayan soltado los calabacines. Luego añadimos la nata, una pizca de nuez moscada y salpimentamos.
Incorporamos el queso desmenuzado, mezclamos todo y rellenamos los calabacines, añadiendo un poco de queso para gratinar por encima.
Ponemos los calabacines en una fuente y los metemos en el horno, que previamente habremos puesto a la temperatura de 200ºC.
Ingredientes
4 calabacines
120 gr. de queso fresco
50 cl. de nata líquida
1 cebolla
Aceite de oliva
Sal
Pimienta negra molida
Nuez moscada molida
Queso rallado para gratinar