07/09/2022.- Así lo recoge el Índice de Precios en Origen y Destino (IPOD) que elabora la organización agraria COAG, que destaca también los incrementos sufridos por los precios de ajo, cebolla, zanahoria, ciruela, repollo y calabacín.
Hortoinfo.- En el mes de agosto el precio medio de la lechuga se ha incrementado un 553 por ciento desde lo cobrado por los agricultores a lo que han tenido que pagar los consumidores, según indica el Índice de Precios en Origen y Destino (IPOD) de los alimentos que elabora cada mes la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG).
En ese mes, el precio medio pagado al productor por cada lechuga fue de 0’17 euros por unidad y el consumidor la pagó 6’53 veces más cara, a 1’11 euros cada lechuga, lo que supone el incremento señalado del 553 por ciento.
El productor de ajo ha cobrado por cada kilo un precio medio de 0’79 euros por kilo, mientras el consumidor lo ha pagado a 5’91 euros/kilo, 7’48 veces más, con un incremento del 648 por ciento.
La zanahoria se pagó al productor a 0’16 euros por kilo y su precio medio en el supermercado fue de 1’06 euros por kilo multiplicándose por 6’63, un 563 por ciento más.
La ciruela se pagó al agricultor a un precio medio en agosto de 0’54 euros por kilo, precio que se multiplicó por 6’41 al llegar al consumidor que pagó por cada kilo de ciruela 3’46 euros, un 541 por ciento más.
En cuanto a la cebolla, el productor la ha cobrado a 0’27 euros por kilo vendiéndose al llegar a los consumidores a 1’52 euros por kilo, multiplicando el precio en origen por 5’63 con un margen comercial del 463 por ciento.
El calabacín se ha pagado en agosto al agricultor a un precio medio de 0’40 euros por kilo, pagándolo el consumidor 4’98 veces más caro con un precio medio de 1’99 euros por kilo, siendo el margen comercial del 398 por ciento.
El repollo aumenta su precio en 5’15 veces desde el productor al consumidor, con un precio medio pagado al agricultor de 0’27 euros por kilo, mientras que el consumidor lo ha pagado a 1’39 euros/kilo, un 415 por ciento más.
La patata se pagó al agricultor a 0’34 euros/kilo y en el supermercado se vendió a 1’57 €/kg, un diferencial del 362 por ciento, 4’62 veces más.
El tomate ha multiplicado su precio medio por 3’85 desde el campo al mercado, ya que al agricultor se le pagó a un precio medio de 0’65 euros por kilo y los consumidores lo pagaron a 2’50 euros por kilo, aumentando en un 285 por ciento.
La berenjena vio crecer en agosto su precio medio en 3’29 veces desde los 0’68 euros por kilo que cobraron los agricultores por producirla hasta los 2’24 euros/kilo que se les cobró a los consumidores, aumentando su precio en un 229 por ciento.
El precio medio del pepino se multiplicó por 2’55. El agricultor lo cobró a un precio medio de 0’77 euros por kilo y los consumidores lo pagaron a 1’96, un 155 por ciento más.
El pimiento verde vio crecer su precio en 3’01 veces, ya que se pagó al agricultor a un precio medio de 0’76 euros por kilo que se convirtieron en 2’29 euros por kilo al llegar al consumidor, un incremento del 201 por ciento. En el caso del pimiento rojo vio multiplicarse su precio por 3’32, al pasar de los 0’87 euros por kilo que cobraron los agricultores como precio medio a los 2’89 que pagaron los consumidores, un 232 por ciento más.
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