El tomate se pagó al agricultor a 0’39 €/kg y el consumidor lo pagó a 2’28 €/kg, la lechuga a 0’17 €/unidad en origen y a 1’19 €/unidad en destino y el limón se pagó al productor a 0’16 €/kg mientras que el consumidor lo pagó a una media de 1’87 €/kilo
Hortoinfo.- 08/03/2024
El margen comercial que la distribución ha obtenido por llevar los tomates desde el campo al consumo ha sido en febrero del 485 por ciento, en lechuga ha subido hasta el 600 por ciento y el máximo se ha dado en los limones con un margen comercial desde el productor al consumidor de un 1.069 por ciento, según reflejan los datos aportados por el Índice de Precios en Origen y Destino (IPOD) de los alimentos, que elabora cada mes la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG).
Durante el mes de febrero, según el IPOD, los tomates para ensalada se pagaron al agricultor a un precio medio de 0’39 euros por kilo mientras los consumidores tuvieron que pagar de media 2’28 euros por cada kilo de tomate, multiplicando el precio desde origen a destino por 5’85.
En el mes pasado, el precio medio pagado al productor por cada lechuga fue de 0’17 euros por unidad y el consumidor la pagó siete veces más cara, a 1’19 euros cada lechuga, lo que supone el incremento señalado del 600 por ciento según el IPOD.
El margen comercial más alto aplicado por la distribución a los productos hortofrutícolas se ha dado en el limón con un 1.069 por ciento, ya que se ha pagado a los productores a un precio medio de 0’16 euros por kilo mientras que los consumidores lo han tenido que pagar a 1’87 euros por kilo, 11’69 veces más caro.
El precio medio percibido por los agricultores en febrero por el kilo de naranja fue de 0’39 euros por kilo, llegando a los consumidores a 2’04 euros por kilo, un incremento del 423 por ciento al multiplicar su precio por 5’23 desde el campo al mercado.
En la mandarina, el precio medio pagado al agricultor en febrero ha sido de 0’51 euros por kilo, que se incrementó un 400 por ciento al llegar al consumidor, que la pagó a 2’55 euros/kilo, cinco veces más.
El precio medio de la berenjena se multiplicó por 5’19 desde el campo al mercado. El agricultor la cobró a un precio medio de 0’36 euros por kilo y los consumidores la pagaron a 1’87, un 419 por ciento más.
El calabacín se ha pagado en el pasado mes al agricultor a un precio medio de 0’41 euros por kilo, pagándolo el consumidor 4’20 veces más caro con un precio medio de 1’72 euros por kilo, siendo el margen comercial del 320 por ciento.
El pimiento verde vio crecer su precio en 2’57 veces, ya que se pagó al agricultor a un precio medio de 0’99 euros por kilo que se convirtieron en 2’54 euros por kilo al llegar al consumidor, un incremento del 157 por ciento.
En el caso del pimiento rojo vio multiplicarse su precio por 2’58, al pasar de 1’16 euros por kilo que cobraron los agricultores como precio medio a los 2’99 que pagaron los consumidores, un 158 por ciento más.
El pepino multiplicó en febrero su precio medio por 2’85 desde el campo al mercado. El agricultor lo cobró a un precio medio de 0’78 euros por kilo y los consumidores lo pagaron a 2’22, un 185 por ciento más.
El brócoli se ha pagado en el pasado mes al agricultor a un precio medio de 0’40 euros por kilo, pagándolo el consumidor 6’90 veces más caro con un precio medio de 2’76 euros por kilo, siendo el margen comercial del 590 por ciento.
El productor de ajo ha cobrado por cada kilo un precio medio de 1’17 euros por kilo mientras el consumidor lo ha pagado a 6’59 euros/kilo, 5’63 veces más con un incremento del 463 por ciento.
La cebolla se pagó a los agricultores a un precio medio de 0’42 euros/kilo, multiplicando su precio por 4’64 al llegar al consumidor que la pagó a 1’95 €/kg, un 364 por ciento más.
La patata se pagó al agricultor a 0’35 euros/kilo y en el supermercado se vendió a 1’81 €/kg como precio medio, un diferencial del 417 por ciento, 5’17 veces más.
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