08/07/2020.- Se trata de un tomate genéticamente mejorado, pero no transgénico, al que se ha dado el nombre de Xantomato, enriquecido con zeaxantina usando ingeniería metabólica transgénica y técnicas convencionales. Una de las principales funciones de la zeaxantina es la de proteger la retina en el ojo humano al filtrar la luz ultravioleta, retrasando así la DMAE.
Hortoinfo.- Un equipo de investigación de la Universidad Hebrea de Jerusalén ha desarrollado un tomate que puede ayudar a evitar o retrasar la DMAE (degeneración macular relacionada con la edad), una de las principales causas de ceguera.
Se trata de un tomate genéticamente mejorado, pero no transgénico, al que se ha dado el nombre de Xantomato, enriquecido con zeaxantina usando ingeniería metabólica transgénica y técnicas convencionales.
Los resultados los resultados de esta investigación se han publicado en “Plant Biotechnology Journal”.
La zeaxantina tiene varios beneficios para la salud humana debido a sus propiedades antioxidantes. Una de sus funciones más importantes es proteger la retina en el ojo humano al filtrar la luz azul dañina, retrasando así la DMAE, pero actualmente está poco disponible para la dieta del ser humano en comparación con otros carotenoides importantes, de ahí la especial importancia que tiene esta mejora, dado que el tomate es el segundo vegetal más cultivado a nivel mundial y tiene un alto contenido de carotenoides.
La concentración de zeaxantina en el tomate Xantomato es del 50 por ciento con respecto a los carotenoides totales de la fruta, en comparación con el nivel cero en el tomate convencional. Esta es la concentración más alta de zeaxantina reportada presente en un cultivo primario.
Los investigadores, encabezados por el profesor Joseph Hirschberg, especializado en genética, biología molecular e ingeniería genética de plantas, dijeron que añadir zeaxantina a la dieta diaria ayuda a reducir el desarrollo de enfermedades degenerativas, especialmente la degeneración macular, que causa ceguera en los adultos.
Hirschberg señaló que el “Xantomato” -denominado así por la “xantófila”, el grupo de sustancias al que pertenece la zeaxantina, se desarrolló utilizando el cultivo genético clásico y las hibridaciones de diferentes cepas.
La zeaxantina constituye más de la mitad de los pigmentos del nuevo tomate, además de las vitaminas y otros nutrientes esenciales que se encuentran en los tomates comunes, señaló. De hecho, la nueva cepa de tomate tiene siete veces más zeaxantina que el maíz, que es la principal fuente de esta sustancia en la dieta actual.
“Hasta donde sabemos, este es el nivel más alto de zeaxantina logrado en cualquier cultivo agrícola importante del mundo”, señalaron los investigadores.