Así lo demuestra un estudio realizado por el equipo de investigación del Centro de Agricultura, Silvicultura y Pesca de la Prefectura de Kioto y la Universidad de Tokio, que comprobó el efecto sobre el trips de mallas de diferentes colores
Hortoinfo.- 14/02/2024
Un equipo japonés de investigación, del Centro de Agricultura, Silvicultura y Pesca de la Prefectura de Kioto y la Universidad de Tokio, ha demostrado que las mallas de color rojo son más eficaces contra los insectos que las de otros colores, según ha sabido Hortoinfo a través de la Escuela de Graduados en Ciencias Agrícolas y de la Vida, de la Facultad de Agricultura de la Universidad de Tokio. El estudio ha sido publicado en Scientific Reports
El profesor Masami Shimoda, de la Escuela de Graduados en Ciencias Agrícolas y Biológicas de la Universidad de Tokio, ha señalado que “probamos mallas rojas que tenían un tamaño de malla mayor que el cuerpo del insecto, pero resultaron aún más efectivas que otras convencionales blancas o negras con un tamaño de malla más pequeño. Este ‘control óptico de plagas’ se basa en la naturaleza de la visión del color de los insectos para mantener alejadas a las plagas”, explicó el profesor, agregando que “la mayoría de los insectos no tienen fotorreceptores rojos en los ojos y les resulta difícil ver el color rojo, por lo que nos pareció curioso que se pudiera utilizar un color invisible para controlarlos”.
El equipo se centró en la plaga del trips (Thrips tabaci), muy resistente a los insecticidas y que causa grandes daños a una variedad de cultivos importantes en todo el mundo, al comerlos y al propagar virus dañinos.
Los investigadores probaron tres combinaciones de colores de mallas rojas (rojo-blanco, rojo-negro y sólo rojo) en tres tamaños de malla (2 milímetros, 1 mm y 0,8 mm). También probaron redes típicas combinadas de negro, blanco y blanco y negro del mismo tamaño, en el laboratorio y en el campo.
En general, todas las redes que incluían fibras rojas tuvieron un desempeño significativamente mejor para mantener alejados a los trips que las redes negras o blancas. En la segunda prueba al aire libre, los investigadores probaron la eficacia de las redes solamente rojas en diferentes niveles de cobertura: sin cobertura, con cobertura total, solo en la parte superior y solo en el costado. Debido a un brote de trips en la zona, se utilizó insecticida. La parcela totalmente cubierta requirió la menor cantidad de insecticida y produjo hortalizas de alto valor comercial. Las parcelas que sólo estaban cubiertas por el techo o los costados requirieron una aplicación adicional de insecticida, en comparación con la parcela totalmente cubierta. En comparación con las parcelas completamente descubiertas, las parcelas con redes rojas redujeron en general el número de aplicaciones de insecticida necesarias entre un 25 y un 50 por ciento.
“Estas nuevas mallas rojas son más caras que los pesticidas a la hora de adquirirlas, pero son más económicas porque pueden usarse durante años. También son muy eficaces para controlar las plagas sin todo el trabajo que implica fumigar pesticidas”, afirmó Shimoda. “Mi sueño es que en el futuro podamos fabricar mallas rojas que no lo parezcan a simple vista, pero que tendrían el mismo efecto sobre las plagas. Con suerte, esto reduciría los costes de fabricación y podremos encontrar formas de aumentar la durabilidad”.
Además de reducir la infestación por trips, otra ventaja de las redes rojas es que, debido a que dependen del color y no del tamaño de la malla, pueden tener agujeros más grandes. Esto mejora la transpirabilidad, reduce la posibilidad de infecciones por hongos y mejora el acceso a la luz solar. Además, debido a un mejor flujo de aire, las temperaturas no son tan altas dentro del invernadero, lo que facilita a los agricultores trabajar en el interior.
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